expr:class='"loading" + data:blog.mobileClass'>

martes, 26 de febrero de 2013

Eres mi lugar favorito.

Y que si se aleja, me quedo diminuta. Conforme se acerca me hace grande. Que cometo errores, que hago daño, lo sé, pero no siempre. Y es que todo el mundo me hace daño y nadie se da cuenta. Que si te necesito a mi lado, es porque quiero que cada vez que sonrías mayormente sea yo la causa y no otra. Que cuando te abrace no quieras soltarme. Que "sola no comprendo la vida". Que sé como tengo que actuar, que ya es mucho tiempo estando a bajo cero. Que no quiero perderte, que yo solo soy yo si soy contigo, no conmigo. Que de fuego se habla en plata, que te quiero con locura, que si por mi fuera, te traería el sol en cada amanecer. Aunque mi amanecer no lo tiene nadie. Que más por mi, que por el resto, es lo que te digo, ya que no lo hago siempre, que si por ti fuese encendía todas las estrellas una a una hasta el siguiente anochecer. Que ya no es que no estés, sino que nunca te has ido. Que te llevo bajo mi piel de hemisferio a hemisferio, que no me alejare nunca ni me iré por el olvido aunque me rompa millones de veces más. Que me alegras siempre, porque nunca me dejas estar triste. Que por amor, estoy otra vez aquí, ahí, en el centro de tu corazón, llamando a la puerta, pidiendo otra vez residencia de sol a sol, que ya no es cobijo, ya es amor. Sí amor. Que te amo sin condición. Que no hay limite. Que si me quemo ya no duele. Que por muchas heridas, estaremos siempre bien. Y ya no es ninguna sensación, que mis sentimientos tienen más coraje que cualquier vendedor de etiqueta. Que no tienen precio, que son tuyos hasta el fin de mis días. Y que si empiezo a hablar de amor... No hay nada mejor que seas la persona más grande del comienzo de mi vida. Porque en verdad hasta que no apareciste, mi vida no empezó. Y es que todo esto es mucho y poco a la vez, nos queda tanto por vivir, y juntos, esa es mi parte favorita.

lunes, 18 de febrero de 2013

Sabor a inédito. Amargo. No sé, un poco de filosofía y una confusa mentalidad. Y como siempre, siempre se nos va el amanecer y nos da por desaparecer, ya que por equivocaciones hemos cambiado y como tantas veces, o nos aprietan o nos ahogan, es así la soga. Que los errores no siempre se arreglan y lo que merezco es lo que pido y este es mi calvario. Todo lo pasado es lo que tengo de mi lado y más tarde o más temprano se vuelve a amanecer ya que no siempre todos viven por amor.

Van pasando los segundos. Un camino al que llamamos vida. Y la vida, la vivimos como sino se fuese a terminar jamás. Vale la pena, la verdad. Elecciones morales y más de tres reproches. Horas  llenas de ilusiones, sueños guardados en dos grandes cajones y a la hora de abordar el barco, me da por quitarme las alas. Ya nadie escucha comunicar el teléfono, nadie llama, supongo que serás tú. Pero ya nadie se cuelga por vivir con inquietudes. Y no es que sea una colgada de la vida, ni la vida una colgada, sino que me suelo colgar de alguien que siempre me delata.

Fuera de sitio. Arte del andar de la voz que susurra un 'quiero escarparme contigo, ahora'. Vámonos, que ya sabes que me gusta salir, confieso que soy metódica y cauta. Mira, no tengo tiempo para cualquier ken que crea que soy otra Barbie y que cuando quiera me meta mano, no. Basta de príncipes que poco a poco se convierten en sapos; adiós melancolías. Ahora se ha convertido en arte recordar cómo olvidarte.

'Se me ponen si me besas rojitas las orejas.'

Damos por olvidadas muchas cosas, pero aun así no desaparecen. Sigo creciendo con la mirada fija de muchas personas, una lucha que hace que me libere del molde; que no me vais a manchar con vuestra hipocresía. Siempre vuelve la luz si la mereces y es que hay que darse cuenta de que nada es lo que parece. Ahora todo el mundo quiere subir y no llega, no saben lo que tienen y se les va todo. El sufrimiento da sabiduría y por eso hay que afrontar cualquier cosa. Nunca es demasiado tarde, y las cosas suelen salirte caras. En la mañana la luz entra por las rejillas de la persiana. El viento ya no pasa por ese banco y de lejos le divisan, ella lo sabe. Nunca va al mismo sitio, aunque casi siempre se le acerca el mismo pidiendo la hora. ¿Y dónde esta la historia? Sí, cada historia, cada momento, tiene moraleja, pero esta no la tiene... '¿Todo siempre bien dices?' Sí, todo siempre bien mientras brilles alli arriba.

Un clásico tras la presión del ruido, ya que ahora te acomplejas por no saber estar cuando las causas pendientes nos han dejado secuelas. El despertar tan largo que te hace echarle media hora más a los sueños. No es por joder, es por decirte que quiero saber de ti, o imaginármelo. Y es que solo me conocen quienes me conocen. 

Y aun así, después de tantas cosas revividas, todo está bien. Tal vez yo no sea como siempre, pero es que lo que hay que mantener siempre es la sonrisa. Me propuse conseguir lo que quería y no conseguir lo que no me convenía, ¿comprendes? Me gusta mantener mis alas. Oír el ruido que hacen por la mañana. Ver como la brisa se escurre por mi ventana. Hasta que llegues tú, el cual será el que se encargue de conservar mis sentimientos y poco a poco sacarlos a flote, haciéndonos un poco más vulnerables. Los cuidarás. Me cuidarás y te gustará el ruido de mis alas. Eso está más que seguro. A menudo conoces a gente en el momento menos adecuado, pero la imperfección de mi amanecer, te hará que cambies. Te acostumbrarás a cualquier chorrada, como a las confusiones. Y eso... que sigo aquí arriba, normal que te inquiete. Anota. Por si me conoces. O por si te da por conocerme.

Lo que no sabía es que te perdí por pensar que te tenía.